Un agente de riesgo puede ser una sustancia química, alguna condición física, ergonómica o biológica a la que está expuesto el trabajador durante el transcurso de sus tareas laborales y que, si dicho nivel de exposición se encuentra fuera de los parámetros normales establecidos por la Resolución 295/03, y con un tiempo de exposición elevado, con el transcurso de los años puede derivar en una enfermedad profesional.